Doce cicatrices
Yantil Bravo Marín, da vida al libro “Doce cicatrices”, está crónica autobiográfica se inicia con el diagnóstico de una lesión auditiva que se transformó en poco tiempo en un dictamen que me otorgaba tan solo dos meses de vida . Este libro es un viaje por paisajes íntimos, es una oportunidad de contar lo que me sucedió y de agradecer infinitamente a quienes nunca me abandonaron. Espero que quienes inician dura pelea contra una enfermedad de aquellas etiquetadas como terminal encuentren en mi experiencia vital una esperanza, acaso una enseñanza.
Les invito a que se aferren a lo más poderoso que tenemos: el amor. Sean felices, porque es su único destino íntimos, es una oportunidad de contar lo que me sucedió y de agradecer infinitamente a quienes nunca me abandonaron. Espero que quienes inician dura pelea contra una enfermedad de aquellas etiquetadas como terminal encuentren en mi experiencia vital una esperanza, acaso una enseñanza.
Les invito a que se aferren a lo más poderoso que tenemos: el amor. Sean felices, porque es su único destino Yantil Bravo Marín, da vida al libro “Doce cicatrices”, está crónica autobiográfica se inicia con el diagnóstico de una lesión auditiva que se transformó en poco tiempo en un dictamen que me otorgaba tan solo dos meses de vida . Este libro es un viaje por paisajes íntimos, es una oportunidad de contar lo que me sucedió y de agradecer infinitamente a quienes nunca me abandonaron. Espero que quienes inician dura pelea contra una enfermedad de aquellas etiquetadas como terminal encuentren en mi experiencia vital una esperanza, acaso una enseñanza.
Les invito a que se aferren a lo más poderoso que tenemos: el amor. Sean felices, porque es su único destino íntimos, es una oportunidad de contar lo que me sucedió y de agradecer infinitamente a quienes nunca me abandonaron. Espero que quienes inician dura pelea contra una enfermedad de aquellas etiquetadas como terminal encuentren en mi experiencia vital una esperanza, acaso una enseñanza.
Les invito a que se aferren a lo más poderoso que tenemos: el amor. Sean felices, porque es su único destino